Leyendo las noticias del día, una en particular es causa de enojo y reprobación ciudadana, llamando a la más profunda reflexión del país, no solo sobre la falta de probidad que quienes gobiernan están obligados a observar, si no también sobre la indolencia demostrada por esos funcionarios corruptos y envilecidos ante el hambre y la desnutrición que sufre ese enorme número de compatriotas en condición de pobreza y miseria. Así en el país que no se produce suficiente leche porque se importa de más, se botan 2 millones de leche importada por PDVAL PDVAL/PDVSA que se venció sin llegar a distribuirse nunca a sus destinatarios en los programas sociales de alimentos. Leamos: “Comienzan traslado de leche. Desde la planta Procesadora y Secadora de Alimentos, ubicada en La Encrucijada de Cagua, en Aragua, comenzó el trasladado, sin destino conocido, de los contenedores con leche líquida de larga duración vencida que estaba en el lugar. Ayer se observó la salida de gandolas con una parte de los 98 contenedores con al menos dos millones de litros de leche que estaban almacenados desde 2009 en esa planta que fue arrendada por Sahect, compañía que presta servicio a Pdval.” (El Nacional). Curiosamente es extraño que ningún funcionario de gobierno naciomnal, estatal o municipal, de la cara al respecto. La impunidad del saqueo del Tesoro público no tiene precedente en la Historia de venezuela. Tampoco la forma descarada de aprovecharse del hambre del pueblo sin saciarla dejando podrir los alimentos importados. Por eso la pregunta que se hace uno es si esto hubiese ocurrido en Francia en tiempos de la Revolución Francesa, el desfile por la rue Saint Honoré, de todos los responsables y cómplices, habría sido inevitable.
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